He atravesado momentos desafiantes: procesos de liquidación, intervenciones, auditorías complejas… y en cada uno he crecido. Porque crecer profesionalmente también significa crecer como persona.
Es tomar decisiones difíciles sin perder la sensibilidad, es aprender a ser firme sin dejar de ser justa.
La verdadera experiencia no solo se mide en cargos, sino en la capacidad de mantenerse firme, humana y resiliente ante cada reto.
El camino profesional no es una línea recta, es una construcción diaria de carácter, decisiones difíciles y aprendizajes que te hacen más humana, no solo más experta.
Beatriz Eugenia Cortés Gaitán